martes, diciembre 28, 2010

Un prophete


Tahar Rahim es el protagonista absoluto de un drama carcelario descarnado, que refleja la crudeza de la vida entre rejas y la compara con la del exterior, no menos dura.
Dirige y escribe el guión Jacques Audiard, que continúa con el nuevo realismo francés, cercanas al documental, con títulos tan interesantes como La Clase.
La mafia de la actualidad se muestra sin tapujos, de la misma manera que en Gomorra, a través de los ojos de un joven árabe, que sin nada que perder, inicia un proceso de aprendizaje que le lleva a ser el protegido del clan corso.
Sólo la amistad le guia por el camino correcto, pero primero tiene que sortear situaciones límite.
Las secuencias de violencia son de una intensidad brutal, sin artificios pero de una dureza extrema, que daña al espectador.

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